“Bien, ahora la ciudad es suya. Pero quiero ir más allá de la ciudad. Ya puedo imaginar cuando posean a toda Italia. Y bien ¿qué harán, chicos, con Italia?… Quiero decir ¿todavía habrá Italia con ustedes?”
“Sin duda. De esto no se preocupe”
Italia celebra el 25 de abril su liberación de la ocupación nazi-fascista y la victoria del movimiento partesano en el norte del país. Este año, para 60 millones de italianos en cuarentena, la liberación tiene un significado particular. El enemigo es diferente, el coronavirus, pero el deseo de ganar y arrancar pronto con fuerza es el mismo.
Nos gustaría invitarlos a conocer el significado del 25 de abril descubriendo un pasaje de una espléndida novela de Beppe Fenoglio, “Il partigiano Johnny”; la más importante acerca de la Resistenza italiana.
Es el 10 de octubre de 1944. Los partesanos de la zona montañosa de Piamonte acaban de ocupar la ciudad de Alba.
“Bien, ahora la ciudad es suya. Pero quiero ir más allá de la ciudad. Ya puedo imaginar cuando posean a toda Italia. Y bien ¿qué harán, chicos, con Italia?… Quiero decir ¿todavía habrá Italia con ustedes?” pregunta un oficial fascista en un tono desfiante.
“Sin duda. De esto no se preocupe” contesta Johnny, el partesano protagonista de la novela.
Después del terrible invierno de 1944-45, constelado de muertos y redadas, en la primavera de 1945 los Aliados lograrían quebrar la Linea Gotica entre el centro y el norte de Italia y liberar las ciudades norteñas una tras otra con el apoyo de las brigadas partesanas bajando de las montañas.
El 25 de abril de 1945 la liberación de Italia es realidad: las tropas alemanas y fascistas se rinden o huyen, asume el poder el Comité de Liberación Nacional (CLN).
Ha llegado el momento de dar una respuesta a la pregunta que el oficial hizo al joven partesano.
“¿Qué harán, chicos, con Italia?”
Todo parece extremadamente complicado en aquel momento. Sin embargo, “aquellos chicos” cumplirán su promesa. Con rapidez y determinación empujarán la transición de la dictadura a la democracia.
El 2 de junio de 1946 Italia se convirtió en República y se instauró la Asamblea Constituyente que elaboró la nueva constitución republicana y democrática. Su fundamentas son la igualdad de los ciudadanos, el carácter fundamental del trabajo, la educación, la salud, la libertad de culto, de pensamiento y de asociación.
75 años después, Italia es un país del G7 con un sistema de salud que les permite curarse gratuitamente, según los más altos estándares, a miles de ciudadanos afectados por el Covid-19.
Así que en las cara felices de todos aquellos que hoy aparecen en los filmados desenfocados de los días de la liberación en 1945, en la gente celebrando arriba de los tanques estadounidenses, en los abrazos a los partesanos en sus uniformes poco ortodoxas, todavía se siente vibrar la percepción de todo esto: aquellas personas no celebran una victoria, sino una liberación y, en particular, un nuevo nacimiento.
¡Que sean imágenes auspiciosas para la Italia de hoy!
