Sin inversiones no hay trabajo, sin trabajo no hay crecimiento, sin crecimiento no hay futuro

 

Valerio De Molli, CEO The European House Ambrosetti

 

 

Valerio De Molli, CEO del más importante Think Tank itaIiano, The European House Ambrosetti protagonizó el 25 de junio un webinar sobre “Estrategias de las empresas europeas en el mundo post-Covid: el caso de Italia y aprendizaje para Chile”, organizado por la Facultad de Economía y Negocios de la Universidad de Chile y en el cual participó también el presidente de Sofofa, Bernardo Larraín Matte.

 

La charla permitió al público chileno conocer la actual situación italiana caracterizada por una fase de gradual re-apertura de las actividades; ahondando además en las estrategias que se están implementando a nivel de políticas públicas para fomentar inversiones y crecimiento.

 

Valerio De Molli destacó como Italia fue primera en ser golpeada por el contagio en el Occidente. Un contagio masivo desde el aparecer de los primeros casos, en la que Italia experimentó la capacidad de contagio del coronavirus sin tener  ejemplos de políticas públicas de otro países occidentales a las cuales mirar. Sin embargo, a partir del 8 de marzo las medidas estrictas de cuarentena total y el sentido de responsabilidad de la población permitieron poner bajo control la pandemia con 55 día de confinamiento. A partir del pasado 3 de mayo Italia está viviendo una paulatina vuelta a las actividades sociales, así como a un nuevo arranque del motor económico de la Nación.

 

De Molli quiso resaltar un dato importante hablando de la expansión del Covid-19 en Italia: el 63% de los contagios totales se han detectado entre la región de Lombardia y en las tres regiones vecinas. Gracias a la cuarentena total en todo el país se logró evitar la difusión de la infección en grande escala a las demás regiones.

 

Pueden ver aquí la conferencia completa “Estrategias de las empresas europeas en el mundo post-Covid”

 

La rapidez de la reacción colectiva fue clave. Dos datos destacan: por un lado el sistema de salud italiano supo doblar el número de camas UCI en apenas un mes, llegando a las  más de 11.000 actuales; por otro el ecosistema industrial puso todos sus esfuerzos en la producción de elementos necesarios a los hospitales y al personal de salud, alcanzando por ejemplo a producir, partiendo de cero, alrededor de 1,4 millones de mascarillas al mes. 

 

Profundizando los efectos de la pandemia en términos económicos, De Molli explicó como la economía global está viviendo un shock asimétrico. Si se asiste al derrumbe financiero de grandes empresas, paradojicamente hay otras que se están beneficiando. El ejemplo más impactante de esta asimetria es el de la aplicación para videoconferencia Zoom, que actualmente vale más o menos como las siete principales aerolíneas del planeta juntas.

 

Tras un presentación muy detallada citando los estudios llevados a cabo por The European House Ambrosetti, las conclusiones de De Molli se articulan en un lema “Sin inversiones no hay trabajo, sin trabajo no hay crecimiento, sin crecimiento no hay futuro”. Él plantea tres políticas públicas favorables a una exitosa proyección del mundo empresarial en la era post-Covid. En primer lugar incentivar el consumo con estímulos fiscales, ayudando empresas y familias con medidas importantes en términos de entradas inmediatas. Luego identificar los sectores estratégicos de cada país y incentivar masivamente las inversiones de empresas –nacionales o extranjeras – en esos sectores. Finalmente actuar con flexiblidad en el mercado laboral y en el estímulo fiscal para aumentar, valga la redundancia, inversion y crecimiento.

 

De Molli entonces concluyó su intervención dejando espacio  la esperanza, siempre y cuando sea acompañada de proactividad, citando una poderosa frase de Gandhi perfectamente aplicable al futuro que nos espera: “En la vida no se trata de esperar que la tormenta pase, sino de aprender a bailar bajo la lluvia”.