No hubo un país, sino un idioma huésped de honor en el Salón Internacional del Libro de Turín: el castellano. Se trata de una novedad absoluta pensada para cruzar fronteras y abrir nuevos horizontes.
La “Piazza dei Lettori” del centro para ferias del Lingotto se ha transformado en “Plaza de los Lectores”, y ha sido el eje cultural y de encuentro físico alrededor del cual se ha desarrollado la más grande e importante manifestación italiana dedicada a los libros.
Una edición protagonizada por el castellano.
¿Por qué el castellano? Porque -en línea con la idea general de los organizadores de promover la exploración y el encuentro de culturas diferentes- se trata de uno de los idioma más hablados en el planeta, un idioma que sigue uniendo pueblos y países. Una lengua, además, entre las más ocupadas en la literatura, perfecta para explorar el ánimo humano contemporáneo.
En la “Plaza de los Lectores” –enriquecida con una biblioteca y una librería “hispanohablantes”- tuvieron lugar algunos de los encuentros más importantes de la feria, con autores españoles pero también con una gran delegación latinoamericana. Entre los más destacados Juan Esteban Constain desde Colombia, quien profundizó la relación entre Gabriel Garcia Márquez e Italia; la autora argentina María Sonia Cristoff; el español José Ovejero, ganador del prestigioso Premio Alfaguara. Y nombres del calibre de Luis Sepulveda, Enrique Vila-Matas, Claudia Piñeiro, Guadalupe Nettel, Leonardo Padura, Karina Sainz Borgo representando el continente latinoamericano desde Chile, Colombia, México, Argentina, Venezuela, Cuba…
Finalmente hay que subrayar la presencia en Turín de Nona Fernández, autora chilena que en los últimos años se estuvo dando a conocer tanto a las faldas de los Andes como a nivel internacional con títulos como Space invaders (Alquimia), Chilean Electric (Alquimia), La dimensión desconocida (Penguin Randóm House) y que la crítica del Salón del Libro acabó de consagrar.
La edición 32 del Salón Internacional del Libro de Turín se ha configurado también como una ventana al mundo para el Made in Italy (en este caso en ámbito literario) y a la vez como puerta de acceso a la península para mercados aparentemente lejanos, por ejemplo el latinoamericano.
Han sido cinco días durante los cuales el tema general de la feria, según el manifesto firmado por la artista visual MP5, fue “El juego del mundo”, con clara referencia a Julio Cortázar y a una visión cosmopolita de la cultura como herramienta de rebelión, de aventura y de posibilidad para tomar diferentes elecciones y caminos. Se han entonces narrados las mezclas, las identidades, las lógicas y las irracionalidades y las evoluciones típicas de la contemporaneidad: todo a través de la pluralidad de las voces de los grandes escritores, científicos, periodistas, artistas y cineastas que han participado en la feria.
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diciembre 27, 2019