La selección italiana de fútbol, mundialmente famosa como “azzurra” por el color celeste de su camiseta, hizo hablar de sí con una operación sin duda novedosa: Italia jugará los próximos encuentros de local de clasificación hasta la Eurocopa 2020 (el primero ha sido el sábado pasado contra Grecia, ganado por 2 a 0) con una nueva uniforma de color… verde.
¡Adiós al “azzurro” tradicional por unos meses entonces! Algo que podría parecer una verdadera locura en contra de la tradición y que – sin embargo – demuestra un espíritu innovador y atento a los cambios en el mundo de la moda y del estilo.
Puma, el patrocinador técnico de la selección italiana, se inspiró para este nuevo diseño en una camiseta verde utilizada por la selección una sola vez en su historia (en 1954 contra Argentina) y que, durante unos años, ha sido también el color de los sectores “juveniles” de la selección nacional.
Sin embargo hay mucho más detrás de esta elección arriesgada pero novedosa que abandona por un tiempo el celeste, adoptado a partir de 1922 por ser el color del estandarte de casa real Savoia. De hecho “Rinascimento”, este el nombre de la nueva uniforme, no es una «polera» cualquiera: su diseño y sus colores quieren evocar un periodo muy particular de la historia de Italia, el Renacimiento justamente, así nombrado porque caracterizado por una nueva forma de ver el mundo y el ser humano, con un enfoque en las artes, la filosofía y las ciencias.
¡Hermoso! Sobre todo porque esta nueva uniforme quiere transmitir el mismo mensaje: el mundo del fútbol italiano está cambiando, el equipo – por decisión del nuevo DT Roberto Mancini – se hace más joven, y también la Nazionale se abre a las novedades y a los cambios, aunque siempre conectados con la historia italiana.
Una elección que tiene mucho que ver con una nueva manera de entender la “maglia”: un símbolo del País pero también un objeto que evoluciona, que cambia a través de los años, de las experiencias y de las personas que contribuyen en representarlo. Una concepción del design y de la moda profundamente italiana entonces, siempre capaz de mirar al futuro consciente de su pasado. Así, si por un lado la referencia a la época renacentista es clara como la alusión al verde de la bandera, es inevitable pensar también en un guiño a un muy actual mensaje ecologista.
Además este importante cambio convierte lo que siempre ha sido un símbolo de uso deportivo en un objeto de moda y, eventualmente, de uso cotidiano y casual. Italia se adelanta así a los demás equipos nacionales, presentando una uniforme impecable desde el punto de vista estético y que bien se adapta a su nuevo utilizo urbano.
Si en la cancha la Nazionale aún tiene que recuperar su estatus de “grande”, ¡en la moda sigue llevando la delantera!
Publicaciones Relacionadas
junio 10, 2019